El titulo no tiene que ver con el sexo, es sobre la corrupción y cultura general del mexicano. Desde que se va educando el escuincle.
Un amigo que dice no comprar piratería debido a que con ello se jacta de no ayudar al crimen organizado lo veo bien. Hace poco le vi unas películas piratas y me dijo que su papa las había comprado. Al respecto le hice ilusión a la frase de aquellos niños que salen en las pelis originales donde uno de ellos dice “Tenemos un papa pirata” Es cierto, la corrupción empieza desde niños.
Así como en las escuelas hacen ejercicios donde se les inculcan diversas profesiones como en la ingeniería, medicina, entre otros, desde niños se les inculca el estado de corrupción que la gran mayoría de los mexicanos tenemos.
Pasaron años en donde me di cuenta que criticar el estado o la gobernación del país pasó a segundo plano al no tener yo derecho de exigencia. Fue un lapso entre mis doce y mis 18 años. Cuando tuve la oportunidad de votar por primera vez lo hacía con toda la inteligencia al respecto que tenia sobre los candidatos y el sistema, e inclusive contra la corriente. Cuando nada me llenaba el ojo determinaba la anulación de mi voto, de perdido creía en las instituciones, en este caso el IFE. Sobre ello no me daba el derecho de criticar sobre la forma de gobernar y ser gobernados por que desde que empecé a tener en mis manos el dinero me entro el instinto corrupto de todo mexicano.
Es cierto que el espíritu consumista te da a tener cada vez una avaricia por tener cada vez más dinero, y si no cubres ello cubres un servicio, en general algo que te salga “gratis”. Inclusive la gente termina por administrar favores, siempre cobrando un favor más caro o más grande que el otro, o administrar las cantidades de favores por dimensiones de otros.
Así se mueve el país, en las sociedades de padres de familias de las escuelas de México, en los puestos públicos en general, en los empresarios, en todo.
La corrupción va ligada a la cultura. No vayamos muy lejos, aquel que está leyendo estas líneas el titulo del post lo engancho, la realidad es que hay un poco de culpabilidad al respecto cuando lee estas líneas. De ahí lo que menciono de la cultura.
Puede ser reciclable la corrupción, deshacer para rehacer. No hay que quedarse con todo el paquete siempre viendo ascendencia en la economía de la persona, de vez en cuando aquel que entro en las garras de la corrupción debe de hacer algo por el prójimo. Quizás sea ello que sea siempre incondicional ante los favores que se me piden. Eso no pasa con el país, el tener esa mentalidad. Si aplicase eso este país sería otro.
La gran mayoría de la gente está metida en esto, al menos en México. No es que no lo quieran reconocer, pero lo ven tan normal que les pasa por alto el mal que le están haciendo al país, eso sí, hay que quejarnos contra Medina, Calderón, y cualquier gobernante que en la red social te cague.
¡Bola de absurdos!!!
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